Oasis que boga en la quietud del reposo
ávida boca insaciable fuente de hibleas mieles,
Navarro mi amado, mimoso, honesto virtuoso
altruista quien disfruta compartiendo sus mies.
Galantes y castaños ojos que sonríen a la vida
culpables de que yo por tu amor suspire,
mi ánima a la tuya se mantiene asida
imposible evitar que en tu amor me inspire.
SI volviera a nacer que la vida me conceda
elegir el brillo del lucero que ilumine mi camino,
sentir tu latido y si no, que me cubra la greda
y mi rostro sé torne cadavérico y cetrino.
Contigo deseo recorrer de la vida las sendas
fusionarnos cada noche en nuestro lecho
así al atizar mi cuerpo la pasión enciendas
sospecho que mi talle resucitaré en tu pecho.
Autora: Ma. Gloria Carreón Zapata.
Imagen tomada de la red.