Aunque tengas palabras discretas y triviales,
si salen de tu boca, se convierten en canto
de melódicas rimas, con el mágico encanto,
de convertir palabras sencillas en joviales.
Es bendición tenerte, compartiendo momentos
cuando el dolor aflora; porque tu decir manso,
hace apaciguar mi alma; la calma y da descanso,
siendo más llevaderos, los odiosos tormentos.
La luz de las estrellas, también dan testimonio,
de noches, cuando el vino, las velas y las flores,
nos forman un paisaje de mágicos colores,
con lúdicos instantes, del amor patrimonio
Si discusiones llegan, sobre lo cotidiano,
sabes discernir entre silencio y las palabras,
siempre con todo claro, lo que en tu mente labras
es armoniosa forma de eliminar lo vano.
Eres mi bendición, agradezco a la vida,
tu cálida llegada fue grandioso momento,
no dudo, hubo empatía, fuerte requerimiento
para así disfrutar, esta paz, bienvenida.