alejandro fozar

XLII.

 

Vi las espinas que preceden a la rosa

vi mis naves naufragar en las cunetas

vi algún Cristo que no predica lo que prosa 

postales de Mar del Plata sin tu letra.

 

Vi mi rey marcado en su baraja

vi sombras que la noche no disipa

vi como el tiempo nos despoja y nos ultraja

las piedras del riñón y de las tripas.

 

Vi el vino caudaloso paciente en el racimo 

vi las noches más negras y más iluminadas 

Vi el animal que ignora su destino

a Celina en el umbral desconsolada.

 

Vi en sus ojos desembocar las madrugadas

vi los malos modales de su vestido

vi la cruz del sur y tres marias crusificadas

la Cólera de Aquiles, su talón herido.

 

Vi la luna emerger desde la costa

vi su roja espuma inquietar los espigones

vi unirse en un camino que se angosta

las desdichas y las decepciones.