Pablo Diaz

Ironía

<!-- /* Font Definitions */ @font-face {font-family:Papyrus; mso-font-alt:"Viner Hand ITC"; mso-font-charset:0; mso-generic-font-family:script; mso-font-pitch:variable; mso-font-signature:3 0 0 0 1 0;} /* Style Definitions */ p.MsoNormal, li.MsoNormal, div.MsoNormal {mso-style-unhide:no; mso-style-qformat:yes; mso-style-parent:""; margin:0cm; margin-bottom:.0001pt; mso-pagination:widow-orphan; font-size:12.0pt; font-family:"Times New Roman","serif"; mso-fareast-font-family:"Times New Roman"; mso-ansi-language:ES-TRAD; mso-fareast-language:ES-TRAD;} .MsoChpDefault {mso-style-type:export-only; mso-default-props:yes; font-size:10.0pt; mso-ansi-font-size:10.0pt; mso-bidi-font-size:10.0pt;} @page WordSection1 {size:595.3pt 841.9pt; margin:70.85pt 3.0cm 70.85pt 3.0cm; mso-header-margin:35.4pt; mso-footer-margin:35.4pt; mso-paper-source:0;} div.WordSection1 {page:WordSection1;} -->

 

Tal vez sea una ilusión ver una flor llorar y a  sus pétalos cayendo sobre el llanto… diciéndoles a todos: estoy muriendo de pena, me mata el remordimiento.

 

Me pregunto en silencio y con el alma rota ¿Por qué llora la flor que ha sido codiciada en demasía?,  ¿Por qué lava en su llanto sus pétalos caídos? y ¿Por qué la ha abandonado la sonrisa que ella  creyó su eterna compañera?

 

Ahora la flor se encuentra sola, postrada en el lecho espectral que disfruta su ignorancia, con la ausencia total de los placeres y un único piropo que llega a su conciencia: el que le da la muerte  ¡Que ironía!

 

PABEDIZ