\"A mi canario que te amo le dije yo/ y él feliz me pidió alpiste./ Ayer supe que el tuyo de tristeza murió/ ¿qué fue lo que le dijiste?\".
No sé si acaso muera antes que tú, quizá…
uno sabe cómo empieza, no cómo acabará,
yo en todo caso, creo que debes prepararte.
Hay cosas que solamente decidirá el eterno,
pero esté donde esté, cielo o en el infierno,
ten por seguro que atento he de escucharte.
Es que en momentos especiales como ése,
hasta la mentira más vil una verdad parece,
por eso a todo lo que digas yo estaré atento.
Piensa que si muero estarás en mi memoria
y querré saber si lo nuestro fue real historia
o lejos de eso, fue simplemente un cuento.
No hará falta que me lleves flores bonitas…
te di bastantes y a todas las hallé marchitas,
así que mucho no me van a agradar ellas.
Háblame con toda sinceridad de tu anhelo
y si quieres mira de vez en cuando al cielo,
tal vez yo esté muy cerca de las estrellas.
O mira al piso, al infierno donde me dejaste
y di que sabes que conmigo te equivocaste,
que ya tarde captaste mi amor en tu camino;
que lo nuestro, eso de quererme y quererte,
fue para ti siempre sólo cuestión de suerte
y en cambio yo, por ti, lo llamé “destino”.
Espero, si muero antes, tengas tu discurso
y que no sea nada más que un vil recurso
por quedar bien con quien sabes que se fue.
Ah y si acaso recuerdas nuestros instantes
y sientes que fuimos dos buenos amantes,
no creas que por haberme muerto te olvidé.
No me traigas flores, de verdad no quiero,
tráeme en tu alma sinceridad si antes muero
y aquel brillo especial que tus ojos decoran;
deja salir tantas verdades que salir ansíen…
y tranquila, que si hay vivos que no se ríen,
recuerda que los muertos… tampoco lloran.
Poema original de Álvaro Márquez
Nacido en Caracas, Venezuela
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Twitter: @poreros
Publicado el 10/5/2015
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