Tú, ser de mi inspiración
Tú, que de tan solo escucharte me excitas
Aun en estos momentos siento tu aroma.
Luego de tantas primaveras sin verte te distingo.
Cuando en las mañanas despierto
Sin abrir los ojos te percibo
Sin estar me ruborizas.
Y las sabanas al rozarme,
Como si fueran tus manos
Aquellas que casi sin palpar
Me mueven como una tormenta.
Te siento, te huelo, se me erizas el alma
Se mojan mis entrañas
Y mi corazón palpita sin parar
Esperando tu cuerpo encontrar.
Amor de mi inexperiencia
Que volcán provocas
Llevándome a la gloria a morar.
Mientras te sienta en mí, no te suelto
Pues en mi corazón sigues siendo iluminación.
Mariposa de Mayo
24 de mayo del 2010