Al menos seguimos aquí, con toda esta vida, y las infinitas posibilidades de enamorarnos por decimonovena ocasión.
Al menos seguimos aquí, rotos y enamorados, inquietos y desvelados, inseguros y torpes, esperando otro golpe.
Al menos la esperanza nos tiene aqui esperando que la noche se haga más negra o amanezca por fin, viendo la cama más grande y percibiendo espacios vacíos.
Almenos ese dolor que no ubicamos exactamente, termina por decirnos que seguimos vivos, exhaustos y soberbios, orgullosos y desdenados, pero sobrevivientes.
Al menos el amor sigue aquí, ingenuamente dándonos palmaditas en la herida, en su torpe intento de darnos consuelo.
Por lo menos nos tenemos uno al otro, rotos y atribulados, planeando encuentro en los bares, dejando la moral en los vicios, y la dignidad en cuartos alquilados.
Al menos estamos aquí, viendo la gente pasar, con sus vidas perfectas llenas de planes, nosotros los desperdiciados tan sólo tenemos esta noche y tal vez otra más...