Carpintero de vientos

A deshoras

Tocas mi aliento

como fiebre,

como nube en el  desierto,

inoportuna e imperceptible

tu voz contagia

de verbos irrepetibles

a la brújula de mi palabra,

y  a Deshoras

posees mi cuerpo,

incendiando

también la calma.

 

A deshoras me navegas,

me llamas,

me doblegas,

me cincelas en tu silencio

que arde,

duele interminablemente,

llueve silencio entre mi sangre…..

me callas….

me ausentas a todas horas,

y entre la eternidad y la distancia

suavemente me destierras,

me despojas…..