Francisco 1987
Esta mañana
como un ciego
esperando el sol
arrastrando soledad
hoy te vi
tan glamorosa
impavida, seductora
te presenté un beso
en la mejilla fragante
y delante de cada
influencia soñaste
con bajarme el dedo
no me importa querida
aunque seas
muy atrevida
y queden pocas salidas