Mama, la verdad no resulta difícil escribirte, porque aunque soy consciente de tu ausencia, mi corazón y mi mente siempre te sienten cerca.
Vieras cuántas veces desde que te fuiste he cogido el teléfono para compartirte una preocupación o una alegría… muchas.
Y en ese momento tu ausencia duele como el primer día, pero me consuelo rápidamente hablándote: “hay mami, yo queriéndote molestar y tu tranquila en el cielo”.
Pero las dos sabemos que nunca te hubiera molestado, es de seguro que habría escuchado tu sonrisa y bendición a Dios, o tu preocupación y la segura oración por mi problema. Sabes mama, eso es una de las cosas que más extraño de ti, tus oraciones, estaba tan segura de que intercedías diariamente por mi, como nadie podría hacerlo; eso, y tu sonrisa, tu voz, tus cantos, el aroma de tu pelo, el pollo sudado que preparabas y tu fe.
Gracias Mama, por haberme dando todo lo que hoy extraño; porque fuiste una mamá a tiempo completo, porque lograste que de forma inexplicable tu amor transcendiera a la muerte y lo sigo sintiendo en mí, y de forma mágica lo vivo dia a dia, cada vez que me enfrento a una situación que devuelve la escena donde las protagonistas éramos tu y yo.
Deseara volver el tiempo atras mas se que eso es un imposible............. jejejeje hoy que te extraño mas que nunca.
Miro al cielo y pido estar ya a tu lado recibiendo un fuerte abrazo tuyo y poder quedarme dormida en tu regazo y de alli nunca mas despertar.
Uff que bello fuera pero no lo es solo fue un sueño mas que tuve.