Esa mirada va junto con la brisa,
en compañía de mis suaves suspiros.
Y la luna no me deja nunca sola
una que otra noche de melancolía.
Miro el segundo del placer de estar aquí,
pedir no podría al querer sorprender.
Amo el afortunado que se unifica,
y que acaricias sutilmente mis letras.
Nunca ignorare el hermoso sentimiento
así que colócate enfrente de mi.
Que en mi mirada dulce te contemplaras.
Eres tú, solo tú y allí aparecerás...
UNANOCHEPARADOS
©Violeta