Sé el idioma de tus manos,
cuando me escribes,
la melodía de tus versos,
cuando me hablas,
la rima de tus ojos,
cuando me miras.
Sé el compás de tus latidos,
cuando recuerdas amores,
el prisma con destellos de colores,
cuando me animas a olvidar,
Sé del calor de tu piel
cuando me sonríes,
cuando cubres de azul este lugar.
Dices que se acaba el tiempo,
que la maleta lista está
que seamos sólo amigos
que resulta difícil pensar.
Ya no estés más vacilante,
mi poeta delirante,
mientras te sobre un minuto vida,
mientras me quede amor para dar,
quizás sólo un día,
quizás sólo un instante,
sin importar que estés distante
permíteme soñar
(Azul)