No puedo ser cauto en el elogio
a la cercana cercanía que le canto
porque siendo cauto perdería
la verdad de las luces acuñadas.
Bajo la sombra de vuelos ancestrales
y en la levedad del aire que se inspira
se acuña el talento en una pluma
que ya estaba en su helénico pasado.
Como estaba ya desde el origen
la sobria sencillez de sus valores
o su entrega desprendida y dadivosa
como espiga en poesía madurada.
O el linaje bondadoso de su ser,
de un blanco nacido de magnolias
y del encanto surgente de vertientes
con luces de cielos arrobados.
Y yo escribo a virtudes tan cercanas
porque en ellas se nutrieron mis estrofas
-tibio latido que mi vida impulsa-
y la savia encendida en sus ascuas.
Y de tanta grandeza de lo humano
o de tanto derroche de su genio,
yo no soy ni siquiera… un instante.
A mi hermana, poeta, que me llevó a ser poeta.
De mi libro “De letras nacidas entre poetas”. 2013 ISBN 978-987-1977-03-1