Tu ser divino es como Vino Blanco, la pureza que hay en ti es transparente e infinitamente bella, que lleva a beberla insaciablemente. Con el deseo de no terminar y recorrer cada parte de tu cuerpo lentamente…. Es como sostener la botella de dicho vino y servirlo lentamente en la copa para no regarlo, como estar tan fundido en ti que sientas todas las sensaciones más maravillosas, haciendo que te despliegues a otro mundo derramando en mí la excitación de bebernos uno al otro sin medidas y en un solo tiempo al toque de bebernos como vino en añejo.
Tu ser es perfecto como Vino Tinto, rojo de amor como la elegancia de tu corazón, candente representativo, bello es tu cuerpo y explosivo, quiero regarme como vino ardientemente entre los mundos que se acoplan al perfil del sol de tu cuerpo, quemarme en los mismo y dejar plasmado mis huellas labiales en ellos, como cráteres de fuego en el universo sentirás los placeres mas bellos y excitantes cuando descubra el universo de tu ser.
Tal vez no puedo decirte que te amo porque nunca te he tenido pero no me arrepiento, ya que imagino amándote todo el tiempo, haría campos de rosas para ti, como ver una botella de Vino Rosa tan frágil y en lo profundo de ella lleva un liquido del color mas bello sensible y tierno que la adórnese, se asemeja a la fragilidad de tu ser divino, bello, amable y sensual. Quiero recorrer dicha fragilidad día y noche, que los dactilares de mis manos, mis besos y aliento queden plasmado en cada rincón de tu ser completo, y al final dejare una marca de color rosa en cada lugar para que siempre la veas y te acuerdes que yo siempre te he amado aunque no te he tenido. Pero también sé que siempre al tomarme cualquier vino siempre me imagino ser parte de tu cariño y darte todo mi amor divino, como tres clases de vinos yo te amaría, te querría y moriría por ti.
Si lees esto, ya me canse de tomar vinos diariamente y pensarte en cada trago, mejor dame la oportunidad de decirte te amo diariamente todos los años amor.