BlackEar

Travesía

Salgo hacia el mundo desolado, a la intemperie ventosa 

Llevo un abrigo de recuerdos, bajo un manto lunar

Camino hacia los confines de la luz, tras la densa montaña

Me espera la incertidumbre, o bien la plenitud 

 

La luz de la luna es mi compañía eterna, 

mientras divago en mi propia caja de agonías

Un gorreón ha trinado cerca de mi oído

Augurio dichoso ante la venida del sol 

 

La nieve cae lenta, sobre las mentes de guerreros aturdidos

Sus cuerpos caen a mi lado, como pájaros muertos ante un cruel cazador 

Las luciérnagas han abandonado la claridad de la noche, 

no queda más que decrepitud 

 

La noche se desvanece, el invierno hace acto de presencia

Los bloques de ilusiones han comenzado a diluirse

Encuentro la calma que tanto he buscado

El silencio perpetuo, la copa de la virtud