Ya está lloviendo
y el agua llamando en los cristales
llora el viento, solitario por la calle
y el corazón durmiendo
día de puro invierno
que riega la sedienta tierra
lamiendo el polvo
y llama el viento en los cristales
queriendo jugar con el pensamiento
mientras cae la tarde
y corre el agua jugando
hasta esconderse en la arqueta
y el canalón cantando
pasa una rana en bicicleta
montada en un papel de caramelo
llora el cielo de agua bendita
que alimenta los forrajes
lindo papel y engranáge
mientras la sed hace su equipaje
pasa un tren en la distancia
silva y corre por su camino
dejando atrás la estación solitaria
y el agua llamando en los cristales
hermoso rincón de nostalgia
hecho poema en el aire
y juega el niño con su barco de papel
en el charco del cemento
respira el alma y descansa
la fatiga por un momento
y se enciende la luz de la calle
y llora el viento
y llama el agua en los cristales...