Son tus palabras, tu lírica y prosa
que me encienden cual fuego,
es cuando te leo que revivo
detonando toda tu sabia aplicada a una realidad.
Son 88 años ya de gozarte, de explorarte
porque te tengo todo
siendo entre comas y puntos
el goce de respirarte, porque “Vivir adrede”
en nuestra “Memoria y esperanza”
eterniza tu obra
El Paso de los Toros te vio nacer,
ya en Montevideo tu querida infancia
y es que en “Esta mañana y otros cuentos”
te recuerdo y espero con solemne devoción
Se amado mío que en este mundo estamos de “Ida y vuelta”
solo espero lo vuestro sea más eterno que “El viaje de salida”
porque mantienes mi “Corazón coraza” en límite ante tu lectura,
dime acaso ¿“quién de nosotros” es capaz de comprenderte
en tu inmensidad de pensamiento?
Quisiera hacer una “Tregua” con la muerte,
mantenerte y gozarte eternamente,
no deseo vivir el “Viento del exilio”
si es que en la “víspera indeleble”
me obligas a vivir el “Existir todavía”
al final presa de “El mundo que respiro”
en “Insomnios y duermevelas” vistas de tu próxima ausencia
Dios salve a “Pedro y el capitán” de
tal desdicha más allá de un sistema inhumano,
porque será ahora que todos mantendremos nuestra
“Primavera con una esquina rota”
donde tú, amado Mario Benedetti
jamás serás parte de aquellos “Recuerdos olvidados”
Clavel Rojo
© Alejandra P. Rodríguez Espinosa. Todos los derechos reservados