Él está sentado en su trono de Gloria, majestad y honor, y mientras Él permanezca allí todo estará bajo control. El Padre Eterno nunca nos abandonará, el Príncipe de Paz llenará nuestro corazón con misericordias y amor, el Rey de luz nos iluminará en las tinieblas en que un día decidimos andar.
La puerta Él toca, \"toc toc toc\" debemos abrir para vivir en sus promesas y bajo la sombra de sus alas. El tiempo es corto para nosotros los seres humanos, un día tendremos que entregar cuentas de lo bueno o lo malo que hayamos cometido, un día el libro será abierto y habrá grandes sorpresas.
Mientras el mundo se sumerge en guerra, yo vengo a compartirte del amor de un Dios Santo, glorioso y sublime que entregó su vida por cada uno de nosotros. No hay oscuridad que Él no pueda iluminar, ni pecado que Él no pueda perdonar, su nombre es Jesucristo, el Alto, grande, eterno y glorioso.
Él está sentado en su trono de gloria y a la diestra está Jesucristo, ven y abramos nuestro corazón al Salvador... Lord Vanvle