No preciso permiso para amarte
ni tampoco poder para olvidarte,
soy camino, soy puerto, soy destino
Abrigo de los tiempos muertos,
velero entre las dunas, serenidad,
balanceos de mar, un tobogán
Semillas de quinoa, golosinas,
allí donde estés te encontraré
prendido en la textura de mi piel
Atravesando lunas escondidas
en montañas doradas sin morada,
sintiendo las pisadas desiertas
Humo en el bosque de alcornoques,
setas salvajes, sombras colgadas
de los árboles entre flores
La brisa que se vuelve espuma de mar,
los filtros de luz solar en un altar,
velas de mil colores encendidas
Tamarindos con los brazos abiertos,
cerezos en flor brillando sin rubor
en la tierra sembrada con amor
Una vida vivida entre los dos
ÁGORA
9/1/2018