EL AIRE ENTRE MIS MANOS
Sólo necesitaba un poco de ternura,
para cerrar la herida que sangraba en mi pecho.
¡Me dolía la vida y el daño que me han hecho!
Tan sólo en tu cariño mi mal encontró cura.
Hoy sangro por la herida que nace en la locura
de tanta sinrazón, en este frío lecho.
Siempre entregada a ti, de esa entrega cosecho
tan sólo desamor, desprecio y amargura.
Un poco de ternura solamente pedí,
ternura a manos llenas, lo que siempre te di.
Mas todos mis desvelos contigo fueron vanos,
y de tanta ternura hoy recibo el revés.
¡Tan sólo por amor puse el mundo a tus pies!
¡Te marchas y me dejas... el aire entre mis manos!.