Claudieta

La casa siniestra

Coleccionaba polvo

insectos y telarañas.

 

Su casa era oscura

siniestra, casi parecía

la casa de drácula.

 

Le regalé una planta

para que tuviera algo verde

y un ser vivo que cuidar.

 

Creo que murió a la semana

¡la pobre planta.!

 

El ocupa de la desgana

siguió viviendo, vegetando

en su morada

 

Los ácaros del polvo

le despertaban por la mañana

y las arañas le construyeron

una capilla donde llorar.

 

La lluvia ya no lavaba su fachada

y el sol ni se atrevía a entrar.

 

Lo intenté una y otra vez;

 todas las rechazaba

¡las pobres plantas!

 

No puede haber vida y milagros

en la casa de drácula.

ni amores ni pecados

en un alma resecada.