Para buscar refugio en las alturas
un ave silenciosa emprende el vuelo
viaja hacia los confines con premura
dejando atrás insomnios y desvelos.
Ha coronado ya de su existencia
una etapa de ensueños e ilusiones,
ahora le espera un sol resplandeciente
y el alma libre de tantas pretensiones.
Lleva en su frente la luz del pensamiento
y en el pecho la voz de su conciencia,
ha tomado del árbol de la vida
los frutos del saber y la experiencia.
En este viaje de retos y virtudes
tienes como bagaje lo aprendido
para luchar en otras latitudes
y no morir de ausencia ni de olvido.