Tras todas las ausencias, tras todos los olvidos
tras las noches sin sueño con rumor sin sonido
tras el tiempo perdido en esperas sin tiempo
y en promesas frustradas que cabalgan el viento.
Tras los besos negados y un amor traicionero,
tras palabras heladas, candentes como el fuego,
permanece mi alma sin mella, resistente,
templada como acero en la forja inclemente