Lago silencioso con su quietud
pinta colores de una puesta del sol,
sin ondulaciones para no distorsionar
el cuadro de serenidad
Tomados de la mano un paseo damos,
palabras no hacen falta para desconcertar
el momento, ya las hemos hablado
con sinceridad
La amargura de chocolate hemos sentido,
nuestros tiempos pasados de indignación,
un espejismo en un indecoroso desierto
de vanidad
Arrepentimientos lavados limpios
por nuestras lágrimas de reconciliación,
nuestro jardín florece de nuevo, regado por
el renacimiento del amor
David Arthur ©® 2018
la foto cortesía de David Robert Sugg