Hay algo muy especial
que como musa apestada
aborda mis desvaríos
para empujarme a escribir
una que otra carajada
De una a diez mil razones
ese algo podría ser:
Aquel viejo desconcierto
aquella constante bruma
aquella eterna inquietud
que acecha en todo rincón
de mi pendeja existencia
eso que siempre me arrastra
a lunáticos paisajes
de sinsabóricos lares
que me atrapan
que me absorben
que me roban el sosiego
que me toman
que adormecen mis sentidos
que borran todo futuro
de ilusas cavilaciones
para seguir pisoteando
este mundo sinrazones…
!Mas, que importa¡
ya en mi no hay dioses que premien
ni demonios que castiguen
tampoco palmas que aplaudan
ni orgullo que se empenache
o deber que se zahiera
con mi proceder terreno.
Lo que soy hoy lo seré
mas no por eso mañana
que aunque también el hoy fue
el mañana de mi ayer
ni el ayer, hoy, ni el mañana
podrán orientar en mi
el camino a recorrer
en mi existencia mundana.