Le temo a la rutina
pienso en aburrirme
pero detrás bien guardado
existe mi riesgo director
se llama amor
y puede llegar a crecer,
como pongo en mi piel lo que no
se marcha del recuerdo
lo que da ese suspiro ultimo,
si es verdad
mi miedo es agarrar cariño a la costumbre
luego me cuesta decir adiós,
sin un odio como interruptor
es dolorosa visualmente
la ceguera por un bombillo quemado.
Temer a tener miedo
negativo por negativo da positivo,
valorar el aquí y el ahora
lo cotidiano me arroja a un vacío
pero allí es donde suelto mis ataduras
y simplemente soy,
mañana podría haber solo un negativo
sin manera de volverlo positivo.
Victoria Monsalve, 2018