Carlos Justino Caballero

EL TEMPLO INTERIOR

 

Desde la altura apical de mi existencia

sin sorpresa alguna trepidando en mi rutina

veía el camino estéril de mi vida

desvanecerse en velados horizontes.

Anhelaba que algún suspiro me besara

con el índigo color de mi recuerdo

pero sólo recibía ese desprecio rancio

que llegaba de mi propio ser.

Y pasaban las horas y yo sentado bajo el roble

divisaba los recodos del camino

tan extraños y tan impersonales

que se hacía necesario ser del aire y volar

para despojarse del desprecio propio

y dar algún brillo al haber sido.

Y fue sorpresa advertir que lo buscado

rondaba en la intimidad de cercanías

y bastaba abrir los ojos para ver contentos

que alborozados me abrazaban

en mi propio templo interior, nunca horadado,

capullo virginal en mi engendrado.

 

 

De mi libro “De trazos del borrador”. 2017 ISBN 978-987-4004-51-2