Santiago Miranda

Me atiborré de esta sucia cultura

 

Sucia como el sucio sexo -y adictivo-
Entiéndase en ese sentido y solo en eso
El personal consumo que consumió al sujeto
Ardido en la afrenta y asujetado al destino;
Un devenir de la mercancía sin azar y sin violencia

Tan amable era este \"arte\" protegido, nauseabundo
Y en el asco ahora soy quien me repito como producto
De este desierto de lo real donde no aparece nada
Nuevo y puro, producción originaria no una copia
De otra copia por el afán de entregarse la degenerada
A la hecatombe por eliminar de sí toda transgresión suprema

Y no sé bien donde ocultar la ceniza de mi camino
Esta vergüenza, cargada en la médula de mis huesos
Bajo la ansiedad de caer en la decadente envoltura
Como otro producto; del mercado en la banalización de vivo

¿Ahora como vomito todo esto? Un sinsentido
Para sentirlo nuevamente desconocido
Bello y vivo; bebo de este amargo pensamiento
Doy todo lo que conozco por un nuevo olvido
-Entiendase como un hecho del pasado, nunca un trato reconocido-
Doy todo lo que conozco por un nuevo olvido