Un rio multicolor se desborda
entre cementos verticales.
Olas cantando una melodía oscilante
que insistente vibra
como latidos armoniosos
vigorosos, reiterantes,
de un magnífico corazón
expulsando en cada sístole
clamores de mil arterias,
agravios, abusos , afrentas,
agresiones y penurias;
acogiendo en la diástole
tanta angustia , tanto miedo
y la rabia
y el cansancio acumulado
en las horas y los días
de siglos de mujeres
La calle es una gran vena abierta
con su sangre derramada
en el asfalto de esta noche
La calle es un grito único
por millones de gritos
de una humanidad desfeminizada.
La calle es el comienzo
de un llano camino
sin obstáculos de género
sin socavones de desprecios
sin guijarros de prejuicios
La calle es un ahora
para un mañana desafiante