La estrella desalineada solloza
ante la huérfana ciencia universal.
Una compacta lágrima en big bang
deja a su paso el cosmos hecho broza.
Eterno agujero negro que goza
al abducir la neurona tenaz.
Universo inquieto que ya no roza
el cuerpo de la insensibilidad.
Junto a Einstein, Newton y Galileo
caminas en la cuarta dimensión.
Los astros han detenido su marcha
por velar el cósmico mausoleo.
Ya luce una nueva constelación
recubierta por un aura de escarcha.