Catacerina

Cónyuge

Baila ebria en mis versos

no se avergüenza de mi cobardía

ha parido mis lágrimas

se abraza a mí en la calle,

ciñe mi cintura

 mama de mis senos

no se consume en la afrenta

de ser mi parasito cotidiano

no me reclama por negar su existencia

me presta su tenue abrigo en las noches

en las que ningún quijote visita mi lecho

no me reclama que la traicione, en algún beso

en algún abrazo con nadie

sabe perdonar mi desesperado y anulador deseo de encontrar

a quien no he perdido

a quien no me espera

sabe que prefiero pernoctar en los brazos de un hombre

que seguir languideciendo de sed,

de desamor entre sus piernas

ella lo sabe

guarda silencio

me hace el amor

solo me pide a cambio

que no deje de llegar a su lado día tras día

noche tras noche con mi adultero rostro

con una roca lista tras mi espalda

 para apedrearla

y finalmente darle vida en su nombre:

Llamarla mi rebelde, mi loca

Soledad...