Y se dio la luz a mis pausados ojos,
Al ver el sol de tu compañía,
Y poco a poco se alumbraron las golondrinas,
En su vuelo, acariciando al cielo,
Mientras tú me dabas de tu alegría.
Poco a poco nació entre mis manos
Un poco de las tuyas, tan tersas y muy limpias,
Y en un abrazo apenas despierto,
El suave arrullo de tu amor,
Dormía diciendo, que me querías.
Poco a poco,
He besado los pétalos de tu flor, que ya es mía,
Y he acariciado con mis labios,
Los besos que aún no me darías.
Poco a poco,
He sido prisionero de tu Amor, y de tus caricias,
Y he soñado con tu pecho abierto,
Para adorar al dulce corazón,
Que entre latidos me escribía,
Escribías frases con un lenguaje que ya conocía,
Escribías con Amor, caricias que fueran mías;
Poco a poco, se va dando el Amor.
Poco a poco,
Mis sentidos dejan de sentir,
Si acaso mi vida sin ti, ya no fuera mía,
Poco a poco,
El Alma se va muriendo,
Si en el silencio, no se siente ya tu alegría,
Poco a poco,
El espacio se hace más sonoro,
Si en la distancia,
No responde tu vida, hablándole a la mía.
Poco a poco,
La distancia se ha echado a la deriva,
Y el navío que tu Amor trae consigo,
Se divisa en el horizonte, con medio sol poniente…
Poco a poco… tu Amor es casi mío.
Si pudiera decir todas las cosas
Y escribir un millón de más palabras,
Poco a poco,
Tu distancia y la mía,
Fueran un sueño, perdido entre la brisa,
Poco a poco… te Amo,
Porque te siento, ya muy mía,
Y el Amor que por ti yo siento…
Poco a poco… me acerca más,
A la dulzura de tu Alma, que también es mía.