Te quiero mi amor ... te lo dije tantas veces,
te amo, te adoro ... te lo mencioné en reiteradas ocasiones,
y al entregarte mi amor, también te entregué mi vida,
mis sueños, mis anhelos y mis esperanzas.
Este tierno e inmenso amor que te tengo,
que no creo que alguna vez alguien te lo podrá dar,
… ni yo, tal vez, lo podré otra vez entregar.
Queda dentro de mí, encadenado, concatenado.
Hoy todo empieza de nuevo,
ya los días no serán lo mismo,
es una vuelta a la página de la vida.
No sé como estarás tú, mejor olvida.
Ya no estés triste, seca esas gotas del amargo desamor
me rompes los sentimientos en mil pedazos,
no quiero ver ese brillo que destella en tus ojos
No quiero ver que te falte el valor, no tengas temor.
No bebas más de los recuerdos,
no permitas que el desasosiego te doble,
guárdalos en el cofre de tu corazón,
y rompe las imágenes de esos momentos alegres,
cuando por el Parque del Amor, caminábamos tomados de la mano.
Pronto las aguas de los ríos del olvido,
se llevarán nuestros recuerdos,
entre las espumas de sus turbias torrentes,
y se disolverán en las aguas de las fuentes.
Quién sabe que caminos tomaremos,
que sendas surcaremos,
el destino caprichoso nos empujara, nos arrastrará
lejos uno del otro, ¿porque vías nos llevará?
Olvida los poemas que te dediqué,
las dulces frases que te susurraba al oído.
No dejes que las emociones te embarguen,
si alguna vez escuchas un verso mío ya no podrás susurrar:
“Me gusta lo que me dices”
En la lejanía, otras vidas, otros amores llegaran,
otras emociones nos esperan,
más te juro que nunca te podré olvidar.
No creo que nuestros caminos se vuelvan a cruzar.
Adiós … ya no me extrañarás.
Sé que pronto tu me olvidarás,
partiré al clarear el alba,
por favor no quiero que te despidas,
déjalo así, como cualquier otro día.