Moliner Vallés

La partida

Luz de alba convertida en ocaso

nubes tapando estrellas

una Luna que apenas brilla.

Seca rama, hojas mustias

hierbajos y flores tristes

alicaídas.

 

Agua seca, barro agrietado

efímeras gotas que caen en la batalla

mar estoico, en calma.

Viento inmóvil que no corta ni vuela

ráfagas de aire que ya no silban nada

susurros en la nada.

 

Los ojos ven la triste flora

el mirar llora en sus entrañas;

el corazón se siente inerte

piensa que ya es hora de partir

de dejarse ir.