Toca tú las campanas,
yo tocaré la flauta andina
que es divina
Yo, yo, yo dijo la niña,
yo tocaré la concertina
Y después na de na
se acabó el concierto
sin haber comenzado
De pronto aparecieron
los burritos, leones,
vacas, pavos, ovejas,
peces ávidos de caricias
un festival de ternura,
abrazos mágicos, únicos
Sintiendo un universo
compartido, muchos mimos,
florece el amor entre los dos
hablan las manos, calla la voz
ÁGORA
18/3/2018