No podemos dejar que la Justicia
este siendo la virgen mancillada,
sometida por siempre a la avaricia
de bandidos con cara disfrazada.
Fue Natura, la madre que nos diera
esta tierra bendita y consagrada,
y debemos buscar cualquier manera
de que brille la luz de Libertad,
y tenemos que izar la gran bandera
de la lucha, que lleve la equidad.
Es deber enfrentarnos con firmeza
ante aquellos tan llenos de impiedad
si queremos mirar la gran belleza
de los halos hermosos de la paz.
Demostremos con grande fortaleza
que abrigamos el fuego mas audaz,
que nos llena las venas de coraje
y que enciende la llama mas vivaz.
El convierte la lucha en oleaje
que le temen verdugos y tiranos,
porque lleva del alma gran bagaje
cuando todos unimos nuestras manos!!
Autor: Aníbal Rodríguez.