Iris Lugo

UN RAYO DE SOL

Abrió el día sus ventanas y por ellas me asomé,
y su hermoso sol radiante la cara me acarició.
Sentí que fueron tus manos las que mi cara tocó,
y sentí que me abrazabas con verdadera pasión.
Abrí mis ojos y vi que fue todo una ilusión
que solo fue el sol radiante que en mi cuarto se coló