Ven a rendirte ahora
ante mi tribunal doliente!
Ven caparazón de aurora
a rendirte toda e indiferente.
Ven a quererme ahora
que no tengo quien me quiera!
Ven recogiendo las esporas
de las flores de la enredadera.
Ven a besarme ahora
con tu humedal de labios rojos!
Con tus modos de señora
a mi corazón de los despojos.
Ven a matarme ahora
con tus manos bien filosas!
Batista mal bordada que decora
con sus flores espinosas.
Ven a gritar ahora
cuanto me extrañabas!
En mis sueños que te imploran
cuando ya no me soñabas...