Vicente Martín Martín

Me parece estupenda tu manera de ver la eternidad

Me parece estupenda tu manera de ver la eternidad

como un caos discutible

o que la muerte

no es la única puerta que nos lleva a los dioses submarinos,

lo que es de recibo es que te apropies de una forma tan cínica

la escala de Jacob y no consientas

que se asomen al limbo los demás gladiadores.

Una cosa es que acudas en Pegaso al hipódromo y te calces

las sandalias aladas de Perseo

y otra muy distinta

que la gente bajita como yo sólo sirvamos

para hacer el amor sobre la hierba y contar la calderilla,

mira tú

quién me iba a decir que con los años se aireaban los hijos y heredaban

los molinos de viento, algo así

como si el tasador de eternidades se paseara desnudo y los guardianes

se hicieran invisibles.

No es más grande el que se saca la entrada de tribuna y saluda a los acróbatas,

no es más héroe quien dice que ha cruzado la mar sobre la escama de un pez

ni es más necio el que calla,

lo extraño es que haya gente que se muera de hambre mientras hay

quienes llena de gorriones los graneros.

 

¿Y eres tú quien me quiere convencer de que las lilas

florecen en octubre?