Brota de los labios el beso
el órgano danza con alborozo
acariciando el cielo de la boca,
el alma alborozada se desboca.
Se agita el corazón perdiendo la razón
la piel cálida se torna, la ilusión la adorna
por un ósculo juguetón de tu boca, que diera
el bálsamo de los dioses bebiera.
Aun fuera beso dado o robado
libaría hasta la última pizca
después mis labios para siempre sellara
para que nadie los tocara.
Bendita esencia, sagrada abejera
es tu boca que evoco y besuqueo
sin ella ausente me pierdo
divisando la lejana cordillera,
por un beso de tu boca yo que diera.
Autora: Ma. Gloria Carreón Zapata
Imagen tomada de Google.