Ha llegado el invierno, contento yo me pongo
mi juguete preferido pondré a bailar.
No tiene muchos colores pero yo así lo quiero,
tallado con empeño por las manos del abuelo.
La tierra húmeda será propicia
y bailará con pericia,
lo vestiré con largo cordel
para desvestirlo de prisa
que gire y gire como carrusel,
subirá a mi mano, dibujando sonrisas;
¡ay! cosquillitas siento al moverse lento.
Mirna Lissett Carranza