Estoy aquí,
vestida de dudas,
con una sonrisa desesperada
y mis ojos dormidos en un sueño...
Estoy aquí...
Mis pies han ido lejos,
pero mi alma sigue
adherida al mismo lugar.
Estoy aquí,
anclada a un recuerdo,
pero sin hundirme
en la locura de la añoranza.
Estoy aquí,
frente a ti...
¿Me darás la mano
y me llevarás a volar?
¿O dejarás que vuele sola
y la cera de mis alas se derrita
con un beso
del implacable sol?