A punto de llamarte, cuando las sombras de mi cuarto
Me acosan por tu ausencia y el frío de mi cuerpo extraña tu presencia…
Aquellas medias gruesas no se igualan a tus brazos,
Que tan solo con rodearme me protegen en un abrazo cálido.
A punto de llamarte, estoy loca, no lo hare…
Tan solo es la madrugada que consume mi ser.
A punto de llamarte, no, mejor solo voy a recordarte
Y calmar mi ansia de ti con recuerdos distantes.
¿y si lo hago?...puede ser, te he estado llamando
a gritos con mi mente, invocándote cada vez
que mi manos buscan y buscan tu dedos y tan solo encuentran un lápiz
para pasar el tiempo.
Esto no lo sabes, te he estado llamando y no lo sabes…
Nunca notaras mi añoranza por ti, porque va a llegar
El día en que en vez de “llamarte” sea “olvidarte”.