Milton Poveda autor 2018
No es tu boca, manjar de dulces miles,
Ni tus labios, jardín de fruta fresca,
No habrá mozuelo que por ti enloquezca,
Tampoco un amor que en tu vida anheles,
No cubrirás tu ser con finas pieles,
Ni en tu rostro hay, dulzura que florezca;
No sentirás aquí ilusión dantesca,
Tampoco dolor, ni pesares crueles.
Si alguna vez, cruzaste por vergeles,
¡Hoy te cubre vegetación marchita!
Impidiendo, que con tus alas vueles.
Postrada en triste lar, tu alma bendita,
Solo recordará cariños fieles,
Siempre que el nepente, en la muerte exista.