Ignacia.

Egoísmo

Egoísmo, como el alfiler que te clavas en la lengua.
Y el tinte que mancha el cielo, como el último sueño de la última noche en la que vives.

Egoísmo, como la vez en que decidiste partirle a la mitad.

Lo ha dejado morir una vez más, en medio de la carretera. Donde ningún alma viviente podría encontrarle.