El alma se me parte si te veo
Someterte a la voz, hecha dolor,
La promesa de darte fatuo amor
A cambio de ceder, así lo veo;
Él nunca entenderá, siempre lo creo,
Renunciar a su falso y fatuo honor;
Su egoísmo siempre es tan superior
A su falaz cariño y su deseo;
En lontananza sufro pues te quiero
Mi más grande anhelo: verte feliz;
Tú sabes muy bien cuánto te venero
Y que eres en mi invierno ese desliz,
Ese mi amor total, firme, sincero,
Que le dio a mi vida un nuevo cariz...