Nuestras vidas estaban marcadas
Todo estaba escrito en el libro de la vida
Llegó el momento de decirnos “Adiós”
Ya nada tenemos que hacer.
Marcamos nuestros destinos
Con dolor y sangre del olvido
Caminamos impertérritos
Al precipicio del ostracismo
Sé que me amaste y quizás me amas aún
Que hiciste muchas cosas por mí
No fui capaz de comprenderte
No merecí tu sacrificio.
No te culpo de nada
Yo soy el asesino de tu amor
Trabajaste y luchaste por mí
Y yo no hice nada por ti.
Hoy derramo lágrimas por ti
Quizás demuestren mi cobardía
Recién entiendo la grandeza de tu amor
Tal vez recién sé que te amo.
Te digo “Adiós” con inmenso pesar
Te llevaré grabada en el corazón
No fui capaz de merecer tu amor
Me condeno al hospicio del dolor.
Te digo “Adiós” compungido de dolor
No me mires, puedes querer quedarte
Eres tan noble que hasta te inmolarías por mí
Por favor abrázame y dime el último “Adiós”
Lima, 3 de marzo del 2018