Amiga, tú me preguntas
si es que acaso yo estoy bien
entre lágrimas respondo
¡Hoy mi boca sabe a hiel!
Es a causa de una dama
a la que amo con locura
y que no puede ser mía
y me quita la cordura.
Tú me dices que la olvide
y que busque otro camino,
yo te digo: ¡es imposible!
que la ame quiso el destino.
Que desee yo sus labios
que destilan vino y miel
que desee yo su cuerpo,
Y besar su blanca piel.
¡Ya termina! ¡Es imposible!
me retas con gran enojo,
pero sigo preso de ella,
más me retas, más me antojo.
¡Ay mi tan querida amiga!
yo quisiera ya olvidarla,
y pensar que ya no existe,
pero no dejo de amarla.
Tal vez será en otra vida,
yo tenga una mejor suerte
no desear lo prohibido
que me provoca hoy la muerte.
Por favor no digas nada
tú bien sabes que te aprecio
ven pronto en mi auxilio
y abrázame en silencio.
-. Par
03042018
Derechos Reservados