Suenan los acordes de una dulce melodía que se encarga de ponerme todavía más triste de lo que ya me encontraba. Sé que el mundo se conspira a contra mía pero me parece injusto. Y entre recuerda y olvida no se borra tu carita de mi mente. Y por consiguiente vuelven versos y apapachos y ese cambio de carácter que me estoy enamorando.
Y entre más te olvido, menos logro. Y entre menos logro, menos ¡largo!