Manto de nieve,
trajo la primavera;
¿cómo se atreve?
Indiferente
ante la tensa espera
de tanta gente,
franqueó aleve
la equinoccial frontera
con lluvia y nieve;
no se merece
la ilusión que genera;
burla parece.
Llueve que llueve
lleva una vida entera
y el sol no vuelve;
sigue en sus trece,
allá en su madriguera
y no aparece.
Se desespera
tanta gente que anhela
la primavera;
que venga en breve
y, tras de tanta espera,
que el calor llegue.
© Xabier Abando, 20/03/2018